Frank Cottrell Boyce es uno de los guionistas más respetados en la industria cinematográfica inglesa. Después de ser el crítico de televisión de la revista "Marxismo viviente", conoció a Michael Winterbottom y los dos colaboraron en "Olvídate de mí" (1990). Winterbottom había realizado otras cinco películas basadas en los guiones de Boyce,"Butterfly Kiss" (1995),"Welcome to Sarajevo" (1997),"The Claim" (2000),"24 Hour Party People" (2002),"Code 46" (2003) y "A Cock and Bull Story" (2005). Boyce también ha colaborado con los directores Danny Boyle "Millions" (2004),"Revenger's Tragedy" (2002) de Alex Cox, y Anand Tucker "Hilary and Jackie" (1998).

En palabras del crítico de cine Roger Ebert, a quien interactuó en línea en el antiguo grupo de chat CompuServe de Ebert a principios de los 90, Frank Cottrell Boyce es "posiblemente el guionista más original y versátil de[Inglaterra]". Boyce ha participado en el foro de Ebert en Internet y en la página web "The Claim" porque no se considera un cineasta profesional, sino un fanático entusiasta. En su tiempo libre, Boyce ayuda a dirigir un pequeño cine independiente, haciendo el trabajo de las palomitas de maíz y actuando como acomodador, lo que incluye tener que echar a la gente.

Boyce y Winterbottom empezaron su colaboración cuando estaba trabajando en un guión sobre los peligros de fumar para la misma compañía de televisión londinense donde Winterbottom trabajaba como redactor en prácticas, puesto en el que era difícil progresar debido al sistema de antigüedad. Estaba tan frustrado como Winterbottom, y para escapar de su aprendizaje infernal, Boyce escribió un guión para la película Winterbottom. Mientras que la película nunca se hizo, fue lo suficientemente buena como para que los productores se interesaran por el dúo.

De un guión escrito por Boyce, Winterbottom realizó su primera película teatral,"Olvídate de mí", que se estrenó en 1990. Cinco años más tarde, se unieron de nuevo para "Butterfly Kiss" (1995), una road movie con Amanda Plummer como lesbiana homicida. A Boyce le encanta la película, que dice que fue escrita y rodada muy rápidamente.

"Bienvenidos a Sarajevo" (1997), el próximo esfuerzo del dúo, fue un docudrama sobre los reporteros que cubrían la guerra civil en Bosnia-Herzegovina. El ex novio de la hermana de Boyce era un periodista asesinado en Sarajevo, y el dúo quería hacer una película sobre la tragedia humana de la guerra civil. Rodada en Sarajevo a pesar de las grandes dificultades, Boyce dice que la película "fue rodada con gran espíritu". Tanto el guión como la película terminada estaban sin pulir, ya que querían rodar la película rápidamente.

Boyce es un fan de Thomas Hardy, y Boyce escribió un guión basado en Hardy's "El Alcalde de Casterbridge" llamado "Kingdom Come" que más tarde fue retitulado "The Claim" (2000) para su liberación. Como la novela de Hardy, un hombre que vende a su esposa e hija pone en marcha los acontecimientos de "The Claim", aunque un cambio forzado en los cineastas provocó que la narrativa se volviera confusa. Boyce quedó decepcionado por la película terminada porque cree que el potencial del guión, en el que él y Winterbottom trabajaron durante dos años, no se había realizado plenamente, ya que Boyce había perdido el control del guión durante el proceso de desarrollo.

Financiado por Pathe por 20 millones de dólares canadienses, el presupuesto más grande con el que Winterbottom había trabajado nunca, la gente de Pathe insistió en que mostrar al hombre vender a su esposa e hija al principio de la película lo convertiría en un personaje poco comprensivo. Al igual que la novela de Hardy, el guión de Boyce había comenzado con el Faust-bargain que determinó el destino del trío. En la escritura, el trato viene después de un extenuante viaje a través del ambiente cruel de las montañas de la Sierra en el que la esperanza es débil y no hay vuelta atrás. Para no perder la simpatía por el héroe, Pathe exigió que el evento ocurriera más tarde en la película, en flashback.

La escena no es tan elaborada como Boyce había escrito, lo que atenúa la desesperación del joven Dillon, protagonista de la película. La película tiene menos sentido que en el guión que no hay vuelta atrás de su viaje a Kingdom Come, el nombre en la choza del minero solitario que cambiará su reclamo por la esposa y el bebé de Dillon. Rodado a una altitud de 7.000 pies en la fortaleza de Alberta en condiciones espantosas, la habilidad de Winterbottom para rodar todo el guión fue restringida.

Moviendo el "crimen terrible" de los protagonistas, como Boyce lo llama, hasta el punto medio de la película, la película se volvió desenfocada y el tema de las terribles maquinaciones del destino quedó sin fundamento. El resultado fue que el drama sufrió. Este "crimen" contra el guión de Boyce por parte de los productores hizo que la película fuera "inútil", cree Boyce, todavía picaba por ceder a los productores y no luchar por su propia visión. "The Claim" abrió algunas reseñas, pero su distribuidor norteamericano, Metro-Goldwyn-Mayer, lo rechazó. Con excelentes actuaciones de Peter Mullan y Sarah Polley como padre e hija, y 45 minutos de hipnot, magnífica presentación en el estreno

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