Michelle Bachelet (0000-0000) Economía y Política
1 Un visitante nos comenta BIOGRAFIA DE MICHELLE BACHELET JERIA
Pretendemos que esta biografía de Michelle Bachelet, a pesar de lo extensa, sea amena En forma simple cuenta de su perfil humano poco difundido a nivel nacional e internacional, sin dejar de mencionar sus hitos más importantes. Nadie puede quedar indiferente al leer sobre su vida.
SU NACIMIENTO
Verónica Michelle Bachelet Jeria nació el 29 de septiembre de 1951. Es la segunda hija del General de la Fuerza Aérea de Chile, Alberto Bachelet y de la antropóloga Ángela Jeria.
La mamá de Michelle cuenta que la ex Ministra de Defensa y actual candidata a la Presidencia de la República de Chile pesó 1,800 kilos al nacer, fue sietemesina. Estuvo en incubadora un mes en el antiguo Hospital de Carabineros.
Su infancia siempre fue de clase media.
Cuando Michelle nació, su hermano Alberto - a quien cariñosamente le decían Betingo - ya contaba con cinco años.
SU EDUCACIÓN
La enseñanza básica la realizó en Quintero, Cerro Moreno, Antofagasta y San Bernardo, siguiendo las destinaciones de su padre. Por el mismo motivo estudió en los Estados Unidos, donde vivió en los años 1962 y 1963.
La enseñanza secundaria la realizó principalmente en el Liceo Nº 1 de Niñas Javiera Carrera de Santiago, y egresó en el año 1969.
Cuando chica era matea y se lo pasaba leyendo, pero no era de esas lectoras aisladas, su sociabilidad era extrema.
En el año 1970 comenzó sus estudios en la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile, donde asumió cargos como dirigente estudiantil, durante el Gobierno de la Unidad Popular.
En su exilio viaja a la República Democrática Alemana, donde estudia alemán en el Herder Institut de Leipzig.
Continúa sus estudios de Medicina en la Universidad Von Humboldt en Berlín.
En el año 1979 regresa a Chile y retoma sus estudios de medicina en la Universidad de Chile.
Recibe el título de Médico Cirujano en el año 1982.
Se especializa en Pediatría y Salud Pública en el Hospital de Niños Roberto del Río entre los años 1983 y 1986.
En la actualidad es doctora de niños, experta en epidemiología.
En el año 1996 estudia Estrategia Militar en la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos (Anepe) donde logró el primer lugar de su promoción y se tituló de Magister en Ciencias Militares de la Academia de Guerra del Ejército de Chile.
En el año 1997 estudió Defensa Continental en el Colegio Interamericano de Defensa en Washington DC. , Estados Unidos.
SU JUVENTUD
¿Sabía usted que Michelle se destaca por tocar la guitarra entonando las canciones de moda y tiene mucho ritmo para bailar? Ahora lo sabe. Cuando era jovencita se le veía a menudo pasear en bikini por las playas de Quintero.
En la década del ’70 estaba permanentemente rodeada de amigos que luchaban por un mundo mejor.
Ya en su más temprana adolescencia, a Michelle se le inculca una cultura de izquierda donde se entiende como primordial la igualdad de oportunidades para todos y la atención y ayuda a los sectores más necesitados.
Desde sus tiempos de juventud milita en el Partido Socialista de Chile.
SU FAMILIA
Michelle tiene tres hijos.
Dos son fruto de su matrimonio con el arquitecto Jorge Dávalos. Dentro de su círculo de amigos es considerado muy simpático y cariñoso.
El hijo mayor se llama Sebastián, tiene 26 años y estudió Ciencias Políticas y Administrativas.
La segunda, que se llama Francisca, de 21 años, estudia en la universidad.
La tercera se llama Sofía, tiene 12, y es fruto del amor de su matrimonio con un destacado médico que a veces hace de papá y mamá de la casi adolescente.
Sus amores y desamores, como toda persona que es capaz de enfrentar los avatares de lo cotidiano, nos reiteran en forma persistente que la vida no es color de rosa.
La tía de Michelle, Cecilia Jeria, es la esposa del ex senador Hugo Miranda, quien fue Embajador de Chile en México, donde estuvo exiliado largos años. Dicen que don Hugo era el senador más caballero que se ha conocido. Tenía su chalet en avenida Santa María, e invitaba a su hogar a los periodistas de Moneda. Cecilia Jeria es autora de un extraordinario libro de cocina.
SUS PENAS Y AVATARES
Considerando su experiencia organizativa en la Fach, en 1972 el Presidente Allende había solicitado a su padre, el General de la Fuerza Aérea de Chile, que se hiciera cargo de la Oficina de Distribución de Alimentos, función que ejercía cuando se produjo el golpe.
El mismo día del golpe militar del 11 de septiembre de 1973, fue detenido y torturado por sus pares en la Academia de Guerra Aérea, bajo la acusación de “traición a la patria”. Posteriormente fue trasladado a la Cárcel Pública, donde el 12 de marzo de 1974, y a consecuencia de los apremios ilegítimos y las torturas padecidas en prisión, tuvo un infarto cardíaco que le provocó la muerte por falta de atención médica.
El General Bachelet alcanzó a enviar a su esposa una carta desde la cárcel pública de Santiago el 22 de febrero de 1974, días antes de su muerte.
Ese aciago día 11 de septiembre de 1973, Michelle se trasladó temprano a la Escuela de Medicina, en Av. Independencia, desde cuyo techo observó el bombardeo a La Moneda que pondría fin al régimen democrático durante más de 16 años.
Michelle contaba con 22 años, ya militaba en el Partido Socialista y cursaba cuarto año de medicina cuando pasó por esos durísimos instantes del padre muerto sin tener ni siquiera donde enterrarlo porque su institución, la masonería, y todos aquellos que fueron sus amigos simplemente se borraron del mapa.
Para la señora Ángela Jeria viuda de Bachelet y para su hija Michelle habían empezado esos días aciagos del golpe de estado.
A mediodía del 10 de enero de 1975 dos agentes de la DINA se presentaron en el departamento donde vivía Michelle con su madre y fueron trasladadas con los ojos vendados a un lugar indeterminado que resultó ser la Villa Grimaldi, el principal centro de torturas de dicho organismo. Michelle Bachelet y su madre también fueron torturadas.
En la Villa Grimaldi separaron a Michelle de su madre y las sometieron a nuevos interrogatorios y apremios físicos. A su madre la llevaron a "La Torre" y a ella la ubicaron en una pieza con camarotes, junto a otras ocho presas. Días después las trasladaron a ambas al centro de detenidos de Cuatro Álamos, donde permanecieron hasta fines de enero.
El capítulo más fuerte en su estadía en Villa Grimaldi fue la visita intempestiva del General Manuel Contreras, quien le sacó la venda que tenía en sus ojos y ella recordará para siempre esa cara. Y el capítulo más emotivo fue el que sembraron en su memoria sus compañeras de celda, Lucrecia Brito, Patricia Guzmán, María de los Ángeles Salinas Farfán, Mónica Villanueva - que tenía 16 años - una dentista cuyo nombre se le escapa, María Eugenia Ruiz Tagle y la primera mujer de Álvaro Covácevich. Se ayudaban mutuamente después de las sesiones de interrogatorios. Michelle atendía a las gravemente heridas. Algunas de ellas le contaron que los días de año nuevo fueron violadas por militares borrachos. Ambas estaban embarazadas de siete y ocho meses. Todas tenían miedo. Cada vez que se abría la puerta de la celda sentían terror porque sabían que una de ellas sería la elegida para ser torturada.
Para colmos – y por injusticias del destino que uno no logra entender - su madre actualmente debe convivir en el mismo edificio con el asesino torturador Moren Brito. Ángela debe soportar encontrarse con él en los pasillos y ascensores.
EL EXILIO
Una vez en libertad viajaron juntas en el año 1975 a su exilio en Australia. Por fin llegaron a Sydney donde su hermano Betingo y su esposa Patty los esperaban en el aeropuerto. Vienen los abrazos, el saludo del gobierno, del parlamento: Eran las primeras exiliadas chilenas en Australia.
En el año 2000 falleció su hermano Alberto. Él había partido a Australia a los 20 años de edad - en 1969 - y luego residió en los Estados Unidos. Nunca volvió a radicarse en Chile. Al morir a los 54 años de edad, tenía dos hijos y una nieta.
Por haber residido un tiempo en Australia junto a su familia, habla el inglés a la perfección y además con mucha fluidez, el alemán, el portugués y el francés.
Posteriormente viaja a la República Democrática Alemana, donde estudia alemán en el Herder Institut de Leipzig y continúa sus estudios de Medicina en la Universidad Von Humboldt en Berlín. En Alemania se casó con el arquitecto chileno Jorge Dávalos, padre de sus dos hijos mayores: Sebastián, que nació en 1978 en Leipzig, y Francisca, que nació en Santiago en 1984.
EL RETORNO A LA PATRIA
Desde su regreso al país de dedica a trabajar en actividades políticas con organizaciones no gubernamentales que entregan asistencia a los hijos de torturados y desaparecidos. Su mamá la define como una mujer suave, pero de carácter decidido, que somatiza fácilmente. Los problemas los atrae hacia su físico y los transforma en malestares. Por eso quizás sus arrebatos de mal genio.
Retoma sus estudios de medicina en la Universidad de Chile a su regreso en el año 1979, y egresa en el año 1982 con el título de Médico Cirujano. Durante los años 1983 y 1986 se especializa en Pediatría y Salud Pública en el Hospital de Niños Roberto del Río. En la actualidad es doctora de niños, experta en epidemiología.
Al recibirse de Médico Cirujano en 1982, postuló al sistema público para ir de médico general de zona a algún lugar del país donde hubiera mayor necesidad de atención. La solicitud le fue denegada "por razones políticas". En cambio, por su desempeño, calificaciones y las publicaciones efectuadas, se ganó la beca Colegio Médico de Chile que le permitió los siguientes cuatro años la especialización en Pediatría y Salud Pública en el Hospital Roberto del Río.
Entre los años 1986 y 1990 se integró a diversas actividades políticas por la democracia y se hizo cargo del área médica de la ONG PIDEE (Protección a la infancia dañada por los estados de emergencia), dando apoyo profesional a hijos de detenidos y de víctimas del régimen militar en Santiago y Chillán e ingresa al Ministerio de Salud, donde ejerce en diferentes reparticiones como el Servicio de Salud Metropolitano Occidente como epidemióloga y la Comisión Nacional del Sida. Simultáneamente fue consultora de la Organización Panamericana de la Salud, Organización Mundial de la Salud y Cooperación Técnica Alemana GTZ.
En este período nace su hija menor, Sofía Henríquez.
Desde marzo de 1994 hasta julio de 1997, se desempeña como asesora del Subsecretario de Salud especialmente en materias de Atención Primaria y gestión de Servicios de Salud.
En el año 1995 integra el Comité Central del Partido Socialista y desde 1998 hasta el año 2000 participa como miembro de su Comisión Política.
A mediados de la década pasada Michelle sentía que Chile había avanzado en la consolidación de la democracia, pero también observaba que persistían dificultades para la plena normalización de las relaciones entre los civiles y los militares. Siente un especial interés por mejorar estas relaciones. Desde su particular experiencia familiar y pensando posiblemente en la carrera de su padre, en Chile., atribuía esta dicotomía a que no se le daba la importancia que requería a una política de defensa y sus correlaciones institucionales, políticas y culturales. Esa reflexión, y además debido a su increíble capacidad de perdón, la impulsaron a realizar un curso sobre estrategia militar, y en 1996 comienza sus estudios de Estrategia Militar en la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos (Anepe). Allí fue una tan destacada alumna que obtuvo el primer lugar de su promoción.
Por este logro académico el Gobierno le otorga la Beca de Honor Presidente de la República para realizar el curso de Defensa Continental en el Colegio Interamericano de Defensa en Washington DC junto a 35 militares y algunos civiles de todas las Américas. Esta especialización le permitió incorporarse a su regreso como asesora del Ministro de Defensa.
En el Congreso del Partido Socialista de 1995 Michelle fue elegida para su Comité Central. En las elecciones municipales de 1996 se presentó de candidata a Concejal por Las Condes.
En 1998 fue reelegida en el Comité Central e integrada a la Comisión Política, responsabilidad que ejerce hasta el 11 de marzo del 2000.
Durante las primarias de 1999, fue la encargada electoral de la campaña de Ricardo Lagos en la Región Metropolitana y en su campaña presidencial trabajó como encargada territorial de la zona Norponiente de Santiago.
SU COMPROMISO EN LA TRANSICIÓN
A su retorno al Chile en 1998 se incorpora a trabajar como asesora del Secretario de Estado del Ministerio de Defensa. Allí se especializa y egresa como Magister en Ciencias Militares de la Academia de Guerra del Ejército de Chile.
El 11 de marzo de 2000 es nombrada Ministra de Salud por el Presidente Ricardo Lagos Escobar. Acepta el desafío de mejorar la atención primaria. El Presidente le impuso dos desafíos especiales: por un lado, mejorar la atención primaria, es decir la cobertura y calidad de la atención de los consultorios, con la meta explícita de poner fin a las denigrantes filas de espera en una plazo de tres meses; y por otro, preparar una gran Reforma de la Salud. En ambas tareas Michelle volcó todos sus esfuerzos logrando resultados ampliamente satisfactorios, considerando su complejidad técnica y las resistencias corporativas a superar. Fue fundamental haber logrado un compromiso y una movilización nunca vista de los equipos técnicos del Ministerio, de los funcionarios de los Servicios de Salud, de las organizaciones gremiales y de todos los trabajadores de la Atención Primaria, que se pusieron como un solo cuerpo tras la meta de terminar con las colas y dar una atención digna. Y lo logró.
Allí Michelle dirigió un Ministerio del que dependían directamente más de 70 mil funcionarios y una red de servicios que llega a todos los rincones del país, además de supervisar directa o indirectamente los servicios autónomos de salud municipales y la extensa área que cubren Isapres y clínicas privadas.
Logró además incrementar las atenciones médicas y dentales, logrando una cobertura a los menores de un año y mayores de 65 años. Por primera vez en Chile, los consultorios abrieron sábados y domingos durante los meses de invierno y se extendió el horario de atención hasta las 20 horas. Se aumentaron los SAPU y las salas IRA para la atención de los niños con infecciones respiratorias agudas y se innovó con salas ERA para los adultos.
No conforme con estos logros, creó la Comisión Nacional de Protección de los Derechos de los Pacientes de Salud Mental y se hizo el Reglamento de Esterilización, contra la discriminación que afectaba a las mujeres.
El plan Hospital Amable contribuyó también a dignificar la atención. Y con un inmenso sentido maternal, abrió los hospitales para que las madres pudieran cuidar a sus hijos y permitió generalizar la asistencia del padre al parto. Desarrolló nuevos programas, como el tratamiento de la depresión en atención primaria; la incorporación de nuevos medicamentos para el tratamiento de la esquizofrenia; el plan de alimentación para el adulto mayor; la cobertura para los enfermos de fibrosis quística, y el aumento de la cobertura de triterapia para pacientes con Sida.
El 7 de Enero de 2002 se encontraba trabajando en su Ministerio cuando recibió la llamada del Presidente de la República. Al llegar a La Moneda el Primer Mandatario la designó como Ministra de Defensa Nacional, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar ese cargo en la historia de Chile y en América Latina, y además, con escasos precedentes en el resto del mundo.
Asegura Michelle que fue una experiencia tremendamente estimulante, tanto en lo profesional como en sus alcances personales. No obstante lo inédita y sorpresiva, las jerarquías institucionales de las FF.AA. y de Orden colaboraron de inmediato al ejercicio de la autoridad política de que fue investida. Con ellas continuó impulsando los planes de modernización en que estaba empeñada, incluyendo relevantes decisiones estratégicas en materia de equipamiento y el pre-proyecto de modernización del Ministerio de Defensa.
Respecto de las modificaciones al Servicio Militar Obligatorio y el fortalecimiento del rol del Ministerio y del Estado Mayor obtuvo importante logros. Se avanzó en igualdad de oportunidades para las mujeres de las Fuerzas Armadas, Carabineros y Policía de Investigaciones. Durante su permanencia como Ministra de Defensa, Chile desplegó un mayor contingente de fuerzas de paz en más lugares del mundo y logró desarrollar relaciones de mayor confianza mutua entre los Ministros de Defensa de la Región de las Américas.
Asimismo, dio cumplimiento a la Convención de Ottawa terminando con los campos minados y minas en stock.
No hay que olvidar que Michelle Bachelet logró dirigir y perdonar a los asesinos de su padre sin haber logrado por parte de ellos hasta este día ni siquiera una disculpa.
Durante su titularidad en Defensa se cumplieron tres décadas del golpe de 1973, fecha que dio motivo a notables gestos de reencuentro entre el mundo militar y el mundo civil. Entre tantos, especialmente significativa en lo personal e institucional fue la reivindicación en la nueva base de Quintero, de la figura de su padre como alto oficial de la Fach y de muchos otros, aun vivos, que en 1973 fueron exonerados por razones políticas.
En el mismo plano, destacó la visita a la Isla Dawson de los ex presos políticos confinados en ese lugar luego del golpe, promovida en conjunto con el Alto Mando de la Armada, la significativa reparación moral del Ejército al General Prats y el valeroso "nunca más" del General Cheyre.
Ejerció el cargo de Ministra de Defensa hasta el día 1º de octubre del 2004, cuando el Presidente Lagos estimó conveniente liberarla de las responsabilidades ministeriales para que pudiera dedicarse de lleno a una candidatura presidencial reclamada masivamente desde la ciudadanía y respaldada en alentadoras encuestas de opinión.
MICHELLE BACHELET, PRESIDENTA DE CHILE
Michelle Bachelet es elegida con la primera mayoría en Marzo de 2006, pero debe apsar a la segunda vuelta, donde gana por un amplio margen a su opositor, convirtiéndose en la primera mujer chilena en llegar a la Presidencia de la República, y la primera presidenta mujer edlegida democráticamente en Latinoamérica.
Con mucho sentido del humor y simpatía, al comienzo de su lanzamiento como candidata a la Presidencia de la República, sus más cercamos colaboradores se autodenominaron “Los Anderos”.
Según el diccionario, de esta no muy poca conocida palabra dice:
“Andero: Cada una de las personas que llevan en hombros las andas”.
Desde su salida del Ministerio de Defensa se dedicó de lleno a la campaña municipal, acompañando a los candidatos a Alcaldes y Concejales de toda la Concertación a lo largo y ancho del país.
Poco después de la elección, fue proclamada candidata a la Presidencia de la República por el Partido por la Democracia (PPD) y el Partido Socialista, desafío que ha asumido especialmente para responder a las expectativas de todas las personas que la apoyan y que le han dado sistemáticamente el primer lugar en las encuestas.
Dijo Michelle Bachelet:
“Soy una chilena ni más ni menos que millones de ustedes. Trabajo, llevo mi casa, y dejo a mi hija en el colegio. Pero además, soy una chilena con una vocación de lucha y de servicio público. Y con una trayectoria política que me ha llevado, sin yo imaginarlo ni pedirlo, a un trance histórico que no eludo: encabezo ampliamente todas las encuestas acerca de quién será la próxima Presidenta de Chile. Porque quiero consolidar nuestro destino como país próspero y desarrollado, pero además construir una democracia más integrativa y con igualdad de oportunidades, estoy convocándolos a que juntos hagamos este sentimiento realidad.
SUS VIRTUDES, VALORES Y LOGROS
Michelle es un personaje femenino, cuya particularidad principal radica en que apareció de la noche a la mañana convertida de pronto en un ícono que rompió los moldes de la cultura machista imperante en la clase política chilena desde la fundación de la república.
Michelle Bachelet se ganó un espacio en la historia del país recorriendo hospitales, juntas de vecinos, pasando revista a las tropas de las FFAA arriba de tanques y aviones y que logró reivindicar el rol de la mujer en un momento de la historia en que los cargos públicos, privados, legislativos, están en manos de personeros que llevan en sus puestos durante décadas sin abrir espacios legítimos a las generaciones de recambio. Su irrupción en este escenario cambió la fisonomía del país en todos sus ámbitos, ya sea para sus adherentes o para sus adversarios.
Hay cientos de mujeres olvidadas que soportaron las mismas pesadillas de esta doctora en niños que tiene una cabaña en un lago y que llegó a ser la primera Presidenta en este remoto país, así como Gabriela Mistral fue la primera mujer latinoamericana en obtener el Premio Nóbel de Literatura años antes que sus pares en Chile le otorgaran el Premio Nacional.
La mamá Michelle Bachelet comenta que a su hija no le gustaba figurar.
¡Por los caminos que nos lleva la vida!
Autor:
Malú Ferrés
ºººººººººººº