Robert Cole (0000-0000) Cine y Televisión
1 Un visitante nos comenta Compositor, Músico, Arreglista y Director de Orquesta
Nombre completo: Robert Lafayette Cole Vázquez
Fecha de nacimiento: 7 de septiembre de 1915
Lugar: Mayagüez, Puerto Rico
Falleció el 7 de marzo de 1983 en Houston, Texas (EE.UU)
Aunque su legado abarca una amplia gama de ritmos antillanos, a Roberto Cole se le venera como una de las figuras representativas de la música romántica nacional. Al género del bolero aportó obras que disfrutan de vigencia imperecedera, todas impregnadas de un personalísimo matiz puertorriqueñista. Pero, además de brillante melodista, este insigne mayagüezano fue un excelente instrumentista y orquestador que integró destacadas agrupaciones y colaboró en producciones discográficas con estelares solistas.
Roberto Cole fue el primero de los tres hijos procreados por el norteamericano Frank Lafayette Cole y Belisa Vázquez. Su padre había llegado a Puerto Rico formando parte de la División de Comunicaciones del Ejército de Estados Unidos que, bajo el mando del General Nelson Miles, invadió Puerto Rico el 25 de julio de 1898. Tenía el rango de cabo y se desempeñaba como telegrafista. Su madre, nativa de Ponce, trabajaba como maestra de escuela pública en el pueblo de Arroyo, donde conoció y se enamoró del entonces joven Cole. Luego ella fue asignada a trabajar a Mayagüez, a donde él la siguió. Se casaron en 1912 y allí establecieron su hogar de manera definitiva.
Por ser hijo de norteamericano, tanto él como sus hermanos fueron bautizados con nombres en inglés y, así mismo, ellos y sus parientes los pronunciaban. Cole, por ejemplo, debía pronunciarse “Coul”. Pero, por causa del trato diario y constante con vecinos, amistades y compañeros de escuela que no entendían el idioma, finalmente optaron por españolizarlo para “no complicarse la vida”. Así, “Robert Coul” pasó a ser Roberto Cole.
Fue precisamente su progenitora quien inculcó – al igual que hiciera con sus otros dos herederos – la vocación artística a Roberto Cole, iniciándolo en el aprendizaje del cuatro cuando éste apenas contaba cinco años. Resulta que doña Belisa había sido discípula del ilustre Juan Morel Campos (el más notable músico boricua del Siglo 19) y ejecutaba muy bien el piano, la flauta, la guitarra y el cuatro. Más adelante, nuestro biografiado también aprendió a tocar la guitarra, al tiempo que tomaba clases de Solfeo con el profesor José Antonio Gaudier. Ya adolescente fue discípulo de Alfredo Antonini en las materias de Armonía y Contrapunto.
En 1930, poco antes de cumplir quince años, compuso sus dos primeros boleros: “Sigue tu camino” y “Lirio blanco”, que solía interpretar en funciones estudiantiles y, más tarde, en serenatas, integrando el Trío Aurora, que completaban su hermano Benjamín y un amigo llamado Julio Medina. Cabe aclararse que la actividad artística de aquel grupo siempre fue a nivel aficionado. Nunca hizo presentaciones nivel profesional. “Sigue tu camino” sería llevado al disco por Rafael Hernández y su Cuarteto Victoria el 20 de septiembre de 1935, aunque esta agrupación ya habría hecho lo propio con otras dos melodías suyas el año anterior (1934): “Palomita” (oct. 16) – primera obra de Roberto Cole en grabarse – y “Mujercita” (dic. 20). En cambio, la primera versión discográfica de “Lirio blanco” se realizaría en 1937 a cargo de la orquesta humacaeña Víctor Roselló & Las Estrellas de Oriente. Por otro lado, ambas selecciones engrosarían el repertorio de Mingo & His Whoopie Kids que, a pesar de interpretarlas en todos sus bailes, nunca llegaría a grabarlas.
En 1932, próximo a cumplir 17 años, emprendió formalmente su carrera musical sustituyendo al cuatrista Pellín Serrano en el conjunto de Manuel Jiménez «Canario», que se encontraba cumpliendo una temporada en Puerto Rico. Meses después, a raíz de que aquel regresara a Nueva York, se unió al grupo Los Jardineros, de Arturo Cátala. Fue durante su pasantía por este colectivo que decidió tomar más en serio su faceta autoral. Hasta entonces, apenas había compuesto cinco o seis boleros, de los cuales sólo conservaba los antes mencionados. De este año data su tercera composición exitosa que, a su vez, constituyó su primera obra éxitosa a nivel internacional: “Romance del campesino”, una guaracha jíbara que demoraría catorce años en plasmarse en el acetato, específicamente vocalizada por Daniel Santos (RCA Victor, 1946). Su impacto sería fenomenal. No obstante, se recuerda que Bobby Capó pudo haber grabado esta pieza, acompañado por una orquesta dirigida por Moncho Usera, antes que “El Inquieto Anacobero”. Pero, éstos la rechazaron pensando que tendría pocas posibilidades de éxito.
Hacia 1935 pasó a formar parte, en calidad de contrabajista, de la orquesta Frank Madera & His Gay Collegians, durante aquella época la más popular de la llamada Sultana del Oeste. Resulta muy significativo el hecho de que, al momento de obtener dicha posición en la referida banda, jamás había ejecutado un contrabajo. Incluso, el día del primer ensayo el propio Madera tuvo que afinarle uno que guardaba en su hogar – y que sería el utilizado por el entonces joven músico –, porque desconocía totalmente este instrumento. Pero, la orquesta precisaba de un contrabajista y, como tanto Madera como los demás integrantes de la orquesta sabían sabían que Roberto Cole era buen guitarrista y cuatrista, confiaban en que aprendería a tocarlo rápidamente. No se equivocaron. Sobre la marcha se adiestró en la ejecución del contrabajo, convirtiéndolo en su especialidad. Durante el período 1938-1939 integró, simultáneamente, la orquesta de Francisco Carballo y el Conjunto Rítmico Hatuey, de William Manzano.
En 1939 se radicó en San Juan con su esposa Carmen Sánchez y el pequeño hijo de ambos, Robert Milton. Durante algún tiempo trabajó con la Orquesta Modelo del trompetista Juanchín Ramírez y, luego, con la del pianista Rafael Prieto, que era la de planta del Panamerican Club. Entonces cobraba nueve dólares semanales. A fines de aquel mismo año y en el referido salón, Rafael Muñoz le propuso unirse a la suya por trece a la semana. Obviamente, aceptó la posición. Se impone resaltar el dato de que Muñoz ya tenía excelentes referencias sobre Cole. Incluso, otro bolero de éste, “Terrible duda”, fue una de las cuatro piezas incluidas en la primera sesión de grabación realizada por su orquesta en Nueva York dos años antes, en voz de Félix Castrillón (RCA Victor, 1937). Su pasantía por esta prestigiosa organización duró – hasta 1941 –, pero resultó muy fructífera, ya que aportó brillantes arreglos a su repertorio, así como varias composiciones, entre las que sobresaldría “Olvídame”, bolero grabado en voz de Víctor Luis «Vitín» Miranda en 1940 y que, con el transcurrir del tiempo, se convertiría en clásico acumulando múltiples versiones discográficas. Irónicamente, ya había ofrecido esta obra a varias orquestas en su natal Mayagüez, pero a ninguna le interesó por considerarla “floja”.
Tras su salida de la orquesta de Rafael Muñoz, nuestro biografiado trabajó como arreglista para otras agrupaciones y desarrolló una destacada actividad en los estudios de grabación, organizando diversas formaciones para acompañar a populares cantantes. En 1944 viajó a La Habana y, en varias oportunidades, actuó como director invitado de la famosa Orquesta Casino de la Playa. Además, a partir de los postreros ‘40 trabajó intermitentemente con las bandas de Miguelito Miranda y los hermanos Luis y Rafael González Peña. En 1949, su guaracha jíbara “Canción de la serranía” se incluyó en la banda sonora de la película mexicana “Amor salvaje”, dirigida por Juan Orol, con Rosa Carmina y Víctor Junco como protagonistas.
Este ilustre músico boricua alternó su intensa actividad artística con su oficio de fotógrafo, en el que se inició a la edad de 16 años tras abandonar sus estudios académicos regulares cuando cursaba el segundo año de Escuela Superior. Todo su historial en el campo de la Fotografía lo acumuló laborando para tres instituciones: el Servicio de Extensión Agrícola del Colegio de Agricultura y Artes Mecánicas de Mayagüez (CAMM) y, ya radicado en San Juan, en la Estación Experimental Agrícola en Río Piedras (1939-1942) y la Administración de Fomento Económico, cuyo Departamento Fotográfico dirigió (1942-1973). Durante esta última etapa, fue designado fotógrafo oficial del gobernador Luis Muñoz Marín y de la Orquesta Sinfónica, para la cual también llegó a realizar arreglos, al igual que los hacía para la Filarmónica dirigida por Arturo Somohano.
Aunque no a un nivel comparable al que él alcanzó, su hermano menor, Benjamín –
originalmente se pronunciaba “Benyamin”, sin acento en la última sílaba –, también se destacó en el ambiente musical como cantante y compositor. Posteriormente fue un prominente líder del Partido Popular Democrático y alcalde de Mayagüez desde 1969 hasta su deceso en 1993. Por su parte, Lester integró algunas orquestas y conjuntos en su ciudad natal durante su juventud.
Roberto Cole radicó durante muchos años, junto a su esposa, en el Condominio Cadiz, en el sector de Hato Rey.
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