Victoriano Huerta (1845-1916) Economía y Política
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Político y militar. Estudió en el Colegio Militar. Durante el porfiriato ascendió a teniente coronel (1894), participó en la campaña contra los indios mayas en Quintana Roo (1903) y combatió a los zapatistas del Estado de Morelos (1910). Escoltó hasta Veracruz al general Díaz, después de su renuncia (1911). Partió al mando de la columna que iba en busca del sublevado Pascual Orozco (1912); durante el trayecto, Huerta tuvo dificultades con su subalterno Francisco Villa, al que no fusiló, como era su deseo, por mediación de otros militares, y fue trasladado a México bajo arresto. En el norte venció a los orozquistas. Una vez iniciada la rebelión antimaderista (9 de febrero de 1913) de Bernardo Reyes, Félix Díaz y Manuel Mondragón, logró que Madero lo nombrara comandante militar de la Ciudad de México, cuando él ya se había entrevistado secretamente con los rebeldes. Se pasó a los sublevados tras mantener un encuentro con Henry Lane Wilson, embajador estadounidense que instigaba a la rebelión. Ordenó la detención de Madero y de Pino Suárez, presidente y vicepresidente, respectivamente, de la República. Muerto el general Reyes en el ataque al Palacio, Huerta logró la renuncia de aquéllos, con lo que la presidencia recayó en el licenciado Pedro Lascuráin, que a su vez dio el cargo de secretario de Gobernación a Huerta. En la noche del 18 de febrero de 1913 y en el lapso de una hora, quedó legalizada la dimisión de Lascuráin y la investidura de Victoriano Huerta como presidente de la República. El día 22 ordena el asesinato de Madero y Pino Suárez; son ejecutados mientras eran trasladados de la intendencia de Palacio a la penitenciana. En la embajada de Estados Unidos se discutió la formación del nuevo gabinete, compuesto como sigue: en el nuevo Ministerio de Agricultura, Manuel Garzo Aldape; en Comunicaciones, David de la Fuente; en Educación, Jorge Vera Estañol; en el de Justicia, Rodolfo Reyes; en Gobernación, Alberto García Granados; en Fomento, Alberto Robles Gil; en el de Guerra, Manuel Mondragón; en Hacienda, Toribio Esquivel Obregón y, en Relaciones, Francisco León de la Barra. En plena sublevación (la rebelión había comenzado en Sonora y Coahuila, y Francisco Villa en Chihuahua comenzaba a sublevar el resto del norte del país), Huerta disolvió el Congreso (octubre de 1913), e improvisó unas elecciones en las que se declaró presidente electo. Mientras tanto, los progresos de Villa eran ya muy importantes, y gran parte de la República se había rebelado. Y sucedió el incidente de Tampico del 9 de abril de 1914: unos marinos estadounidenses del buque Dolphin desembarcaron y fueron detenidos por soldados de Huerta; el Gobierno de Estados Unidos ordenó el desembarco de tropas en Veracruz (21 de abril). Villa, en el norte, venció al Ejército federal, mientras Alvaro Obregón avanzaba por el noroeste y Pablo González por la zona oriental. Torreón cayó definitivamente en manos de Francisco Villa en marzo. Las derrotas del Ejército federal se fueron sucediendo una tras otra: los villistas tomaron Chihuahua y Ciudad Juárez; entran en Saltillo el 21 de mayo, y los federalistas de Huerta sufren la derrota definitiva el 24 de junio de 1914 en Zacatecas. Huerta dimitió el 15 de julio de aquel año y salió del país: pasó por Inglaterra, residió en la ciudad de Barcelona, España, y estuvo en Cádiz antes de salir hacia Nueva York el 31 de marzo de 1915. En España entró en contacto con personas interesadas en que volviera al poder, y con agentes de Alemania que ofrecían dinero y armas. En Estados Unidos prosiguió sus actividades, trabó contacto con Franz von Rintelen y Franz von Papen, agregados naval y militar de la embajada de Alemania en Washington; se entrevistó con los generales Ignacio Bravo, Pascual Orozco, Vicente Calero Vergés, con el licenciado Enrique Gorostiza y con otros políticos y militares mexicanos. Como agentes del Gobierno de Estados Unidos lo tenían en estrecha vigilancia y conocían sus actividades subversivas, lo detuvieron junto con Pascual Orozco el 26 de junio en Newman, Nuevo México, y lo llevaron hasta El Paso, lugar en el que quedaron libres bajo fianza. Nuevamente encarcelado en Fort Bliss, donde enfermó de cirrosis hepática; fue trasladado junto a su familia, llegada de España, y falleció pocos días antes de la fecha en que había de ser juzgado en Estados Unidos por los delitos que en dicho país se le imputaban.