Belangie Alhu (1990-0000) Literatura
1 Un visitante nos comenta Lo sé, debería poner mi verdadero nombre; pero, tengo mis propias razones para estar escondiéndome detrás de esta mascara. Nací hace solamente 17 años, y en la mayoría del mundo -por no decir en todo- soy menor de edad. Los seudónimos siempre los he usado para protegerme. ¿De quien? Pues de todos. Una joven, tan confiada como lo soy yo, andando por allí sola en el inmenso mundo virtual, donde no hay barreras que impidan ni que protejan, necesita algo detrás del cual resguardarse, entonces yo misma lo cree: Un simple velo, que no cubre mi verdadero ser, pero si evita que me vean directamente.
Ya dije, hace 17 años nací, año 1990, en una ciudad en la zona norte de un país ubicado al sur. En un hospital grande donde mi nacimiento no fue novedad, a pesar de las complicaciones que tuvo mi madre al darme a luz. En esa ciudad no estuve mucho tiempo, una vez que venció la licencia de mi mama, me llevaron a donde hasta el momento vivo.
Lo que sí fue un acontecimiento fue la primera vez que asistí al colegio, en abril de 1993. Un mes atrás me había fracturado una pierna, y con el yeso fui a estudiar, acompañada de mi madre que ahora tenía 7 meses de embarazo.
El nacimiento de mi hermano fue una historia muy distinta a la mía. Mi madre se mudó temporalmente -a la ciudad donde mi padre trabajaba- para darme a luz, mi hermano nació en esta misma ciudad - mi padre ya había cambiado de trabajo-; mi madre, cuando primeriza estuvo 3 días en trabajo de parto, esta vez fueron sólo 3 horas; yo fui uno de los tantos nacimientos en ese hospital, el segundo de nuestro clan fue el primero. Mi único hermano.
Salí yo del nido, y entró el enano -como lo llamo cariñosamente-. Yo me fui a estudiar a cuadra y media de mi casa. Un colegio privado exclusivo para niñas y señoritas, uno de los mejores en su época. Un colegio con historia, donde yo estudie 7 años de mi vida. No destaqué en la parte académica, eso me aburría; pero si en lo que es música. Cantar, danzar y bailar son mi vida aÚn, no son toda mi vida pero sÍ forman parte importante de ella. En el último año logre alcanzar los 5 primeros puestos, sin embargo, el colegio presentaba problemas económicos que amenazaban con su cierre, así que por prevención, me cambiaron al colegio donde estudiaba mi hermano la primaria.
Era un colegio del triple de grande del anterior; yo tenía ya mi reputación hecha allá, ahora tendría que forjarla de nuevo; interactuaría también con chicos, raza desconocida para mí. Fue un gran choque cultural el que sufrí, a pesar que ni siquiera salí de la ciudad que me estaba viendo crecer.
Hice varias amigas, todas éramos muy amables; claro, así somos siempre las chicas. Tuve solo amigas -A mi mejor amiga la conocí aquí, la niña modelo-, mas no amigos; si hablaba con chicos era porque eran los amigos de mis amigas, no por que eran mis amigos; al menos, yo nunca los consideré así. Al ingresar a este colegio pensé que mi grupo de amigos ahora si seria mixto, pero nada. No obstante aquello, todo transcurrió sin problemas, a pesar que mi nivel académico era bajo. Ahora destacaba por idiomas -desde que entré a un instituto a aprender inglés- y luego también en canto. No volví a la danza porque detestada a esta profesora tan voluble; mi mejor amiga era la única que la comprendía, y ni por ella volví a bailar. Y así pasaron velozmente estos últimos 4 años de mi educación media.
Recuerdo hace poco preguntando donde esta el salón de 1° grado, y ahora voy sin titubeos hacia el aula donde escucho clases en la universidad. Bonita ilustración la que hice sobre paso del tiempo, todo relacionado a lo académico: el nido, primaria, secundaria y ahora la superior. Que puedo hacer, ese ha sido el eje de mi vida esos 14 años de escolar. Pero una vez cerrada, sólo la recuerdo sin nostalgia, no hay deseos en mÍ de volver a vivirla, no tengo remordimientos de lo que hice puesto que todo lo pasado, ya pasó, enfoquémonos en el presente.
Antes de eso, aún queda un año que contar. El ultimo año como escolar, la promoción "A fructibus eorum cognoscetis eos"; Pienso que sería pecado olvidar contar este año. Canté como solista, y a mis amigas les gusté. Volví a la danza, y me presenté en una coreografía de festejo donde nosotras bailábamos al ritmo de lo que los chicos tocaban en el cajón, bongo y cajita. Dejé el inglés y comencé a estudiar francés-donde conocí a otra muy buena amiga-. Subí a 5 mil metros sobre el nivel del mar en el viaje a Pastoruri, una de paradas en el viaje de promoción. Me la pase todo el año de promoción mirando a un chico de lejos. Soy tímida, nunca me atreví a hablarle. Lo más estúpido es que si él pasaba cerca durante el recreo, a mi se me iba el habla. Lo mejor será que se quede escondido dentro de mi ser este sentimiento: sin que nadie mas que yo lo sepa, y bueno, ahora también ustedes; Aunque quiero quitarme ya mis infantiles ilusiones y avanzar.
Llegó el final del año, la fiesta de promoción, la graduación y buscar una universidad. Ya mi etapa escolar ha acabado, y con ella he dejado todo atrás -menos a mi mejor amiga-. Hace unos 3 días he comenzado mis estudios superiores de pre-grado en ciencias de la comunicación. También este año seré ya ciudadana. Cuántas cosas más cambiaran ahora en mi vida? No lo sé. en la marcha descubriré mi camino y mi porvenir.
No doy nombre de lugares ni de personas, porque con eso, algún conocido de este lado del computador puede leerlo e identificarme. Esta careta de "Belangie Alhu" no es solo para protegerme de los que están allá, sino también de los que están acá. Expongo ante extraños mi ser y mi historia; me expreso libremente, sin miedo al que dirán; digo lo que soy, pero nunca quien soy.